El cuarto día amaneció nublado y nos temíamos que se estropeara la excursión por el bosque.
La primera visita fue al castillo de Hamelschensburg.
A continuación empezamos el camino para terminar en lo alto de una colina donde Thorsten nos esperaba para hacer la comida al aire libre.
Regresamos a la ciudad de Hamelín entre juegos después de un largo paseo.